Queridos feligreses:
El miércoles de ceniza es el punto de arranque de la cuaresma. Comenzamos una peregrinación comunitaria y personal que nos aproxima a vivir el misterio de amor más grande. Jesucristo, el hijo de Dios, da su vida por nosotros… hasta la muerte en una cruz. Él, desde el comienzo de su vida, se ofrece por nosotros. Él nos da su Palabra hoy como a quienes le escuchaban en torno al lago de Galilea; nos cura, como a los enfermos que se acercaban pidiendo consuelo y perdón; Él nos perdona y nos sigue llamando a la conversión. Jesucristo pone su confianza en nosotros y nos invita a que seamos discípulos suyos, como aquellos primeros que le siguieron incondicionalmente y que hicieron posible la propagación del Evangelio en todo el mundo conocido.
Los cristianos queremos responder a esta llamada que Jesús, el hijo de Dios, nos sigue haciendo hoy. La cuaresma es un tiempo fantástico para crecer en la fe y en el seguimiento del Señor. Es el tiempo que precede y dispone a la celebración de la Pascua. Tiempo privilegiado de escucha de la Palabra de Dios y de conversión, de preparación de memoria del Bautismo, de reconciliación con Dios y con los hermanos. Es un tiempo para vivir con más intensidad la penitencia, especialmente con el ayuno, la oración y la limosna. Se trata de un tiempo para actualizar y profundizar nuestra vida de fe y crecer en el seguimiento de Cristo Jesús y en la participación y vinculación con la Iglesia.
En nuestra parroquia de Santa Engracia celebraremos una serie de actos que nos ayudarán a vivir con intensidad este tiempo de gracia. Me gustaría destacar dos de ellos. El primero es la “Semana por la Iglesia perseguida” que tendrá lugar entre el 15 y el 22 de febrero. Serán unos días de oración y solidaridad por quienes viven la fe amenazados. Su testimonio nos impresiona y alienta para crecer en nuestra vida cristiana. No les podemos dejar solos, ellos nos necesitan. El segundo es la iniciativa eclesial propuesta por el papa Francisco “24 horas con el Señor”. Tendrá lugar el 9-10 de marzo (viernes y sábado previos al IV domingo de Cuaresma). Desde las 19’30h del viernes y durante 24 horas nuestra parroquia permanecerá abierta, habrá turnos de adoración al Santísimo y
disponibilidad de confesores para celebrar el Sacramento del Perdón. Durante ese tiempo también habrá vigilias y oraciones en un programa que publicaremos más adelante. Además de estas iniciativas, al final de esta hoja encontrarás otras y también las acciones que, habitualmente, se desarrollan en nuestra basílica-parroquia, tanto en el ámbito litúrgico, pastoral o caritativo-social.
Comienza la cuaresma, un camino que nos aproxima a vivir y celebrar el misterio del amor de Dios con nosotros, sus hijos.
No lo desaprovechéis. Merece la pena.
Estoy a vuestra disposición.
Santiago Aparicio